Una y otra vez…
Con los pies colgando de la cama,
el corazón saliendo de su pecho,
las manos rodeando su cabeza,
las gotas de sudor recorriendo su cuerpo,
_repetía una y otra vez, _ —¡»no puede ser, —no puede ser»!.
la misma pesadilla de siempre _ —¡ Te veía muerta!
—y así es ! —contestó ella.
—No pasa nada,— ¡tranquilo Milú!
—¡¡¡¡ lo has conseguido!!!!..